El mundo del cine y los mitómanos Blade Runner, lloramos como lágrimas bajo la lluvia el fallecimiento a los 75 años de edad de Rutger Hauer. La carrera de este actor, holandés aunque prolífica, fue muy irregular. Pero ha pasado a la historia por su interpretación del replicante Roy Batty en Blade Ranner, dirigida por Ridley Scott y estrenada en 1982.
Me acuerdo perfectamente que por aquél entonces era un jovencito universitario. La película se estrenó en un actualmente desaparecido cine del Paseo de Gracia, algo más arriba de la Pedrera. Alguien me habló fascinado de esta película y decidí ir a verla solo un día antes de que la retiraran. Fue una experiencia simplemente indescriptible (además aún se podía fumar en el cine).
En esa época no sabía ni quién era Ridley Scott ni Harrison Ford ni Rutger Hauer; y creo que conmigo la mayoría de los que vimos esa película, que pasó en su estreno sin pena ni gloria. Luego el tiempo que la inmortalizó nos permitió sentir lo que debieron experimentar los pastorcitos de Belén, para durante toda su vida decir: yo vi algo grande cuando apareció y nadie me lo ha contado.
Simplemente pletórico, y accidental a la vez, fue el monólogo final del Replicante. Aunque escrito por David Webb Peoples, aparece en la película una versión diferente que contó con la aportación de Rutger Hauer. La noche antes de rodar eliminó algunas líneas y agregó la ya casi eternal frase: «All those moments will be lost in time, like tears in rain». Ahí va la hipnótica escena que quedará perpetuamente en el recuerdo de los amantes del cine.
Monólogo final: «Yo he visto cosas que vosotros no creeríais. Atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo, como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir«.
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